La salud al igual que la vida es una construcción permanente.
Cómo recuperar tu salud cuando tienes más de 30 años
Podríamos dividir la vida por décadas, cada una de estas trae consigo retos emocionales, físicos, espirituales e intelectuales. A partir de los 10 años empezamos a cosechar todo lo que hemos hecho en la década anterior, es decir, todo lo que hicimos hasta los 10 años nos va acompañar de los 11 a los 20; la ventaja es que en esa etapa aún estamos al cuidado de nuestros padres que en términos generales siempre van estar buscando la mejor forma de alimentarnos.
A los 30 años cosechamos todo lo que hicimos desde los 20, que si lo miramos en retrospectiva no es el momento de mayor conciencia corporal, es en esta etapa universitaria donde cocemos los trasnochos ya sea por el trabajo que debo entregar al día siguiente o por la parranda imperdible del momento la cual se empata con la respectiva madrugada. Entramos al mundo de los tóxicos y por este camino pasa el alcohol, el cigarrillo hasta el buñuelo del señor de la esquina hecho en un aceite requemado que no lo limpian desde el primer día de uso. Si, el punto de partida de los 30 años no es el mejor, y aceptémoslo, la madurez trae en sí misma la conciencia del autocuidado, pero no necesariamente hicimos la mejor siembra o tampoco sabemos que hacer para cultivar nuestra salud en la siguiente.
Soy Juliana Sierra, médica y fundadora de la Clínica Oxivida y en esta oportunidad quiero hablarles sobre cómo construir una adecuada salud a partir de los 30 años, una etapa en la cual nuestro cuerpo empieza a deteriorarse.
La madurez biológica y sus efectos
Entendamos la madurez bilógica como ese momento en el que el cuerpo ha llegado a un completo desarrollo en sus funciones, por ejemplo, ya se formaron las conexiones neurológicas que nos permiten tener claro las consecuencias de nuestros actos, hay suficiente información acumulada para tomar decisiones y en otros escenarios las hormonas están en su mejor momento, activas y disponibles; la producción de colágeno y elastina están a tope y se producen en una muy buena cantidad, entonces el peso, la calidad de la piel y la producción de masa muscular es fácil o por lo menos más fácil que si estamos hablando de una persona de 40 en adelante. Ese momento de madurez biológica es entre los 30 a 35 años, de ahí en adelante tenemos un momento de meseta cuyo tiempo dependerá de los cuidados que tengamos y por último un periodo en donde declinamos, entonces ya no hay producción, lo que hay es pérdida.
La siguiente pregunta a responder es ¿Cómo hacemos para cultivar una buena salud a partir de los 40 años, cuando ya hemos pasado la madurez biológica y empezamos el deterioro corporal? Ya hemos hablado de que la salud se construye a través de mantener una adecuada respiración, buena alimentación, ejercicio, buen sueño y un entendimiento de nuestras emociones, el punto es que cada una de las etapas de nuestra vida tiene unos detalles que es importante conocer para mantener nuestro cuerpo en la mejor condición posible. De los 40 en adelante las funciones que nos garantizan el buen estado corporal son el mantenimiento del peso (a base de músculo) y el sueño, ya que es por el inadecuado funcionamiento de estas que se desencadenan una serie de enfermedades y esto se da como un efecto dominó.
La pérdida de músculo como precursor de diabetes y otras enfermedades
Cuando hablamos de que a partir de los 35 años empezamos con la pérdida del colágeno y elastina, en carta blanca estamos hablando de la pérdida de fibras musculares. El músculo es el órgano que más consume energía en nuestro cuerpo, cuando este se empieza a perder es reemplazado por la grasa, y entramos en un círculo vicioso en donde se pierde músculo, se consume menos energía y la energía que no soy capaz de consumir la acumulo en grasa. A largo plazo esto se observa como mayor flacidez en nuestro cuerpo y con el inicio de las alteraciones metabólicas, es decir cambios en los niveles de azúcar, colesterol, triglicéridos y demás, por eso es común escuchar “estoy comiendo como siempre y estoy subiendo de peso”, claro es que ya no tienes la misma cantidad de músculo que consuma la misma energía, entonces el secreto está en recuperar y mantener el músculo y para eso hay varias opciones:
- Almuerzo y cena. En esta etapa es insuficiente 1 huevo, este debe ser acompañado por otra proteína (pollo, por ejemplo), es mejor incluso 2 huevos o huevos con tocineta o champiñones.
- Hacer ejercicio: En esta edad el ejercicio es irremplazable y este ejercicio si o si debe hacerse con peso, en la mañana y en ayunas es una excelente opción ya que nos favorece el consumo de grasa y los niveles de creatina endógenos son mas altos en este horario.
- Ayunos intermitentes: son una buena idea, simplemente recuerda que para que esto sea eficiente deben ser por más de 12 horas.
- Ayudar a la producción de colágeno y elastina: la verdad es que las mejores estrategias terapéuticas para esto son la aplicación de Vitamina C por lo menos 10 gramos semanales o la aplicación de ozono.
- Consumir nutrientes o grasas de cadena media: también conocidos como triglicéridos de cadena media, el alimento más rico en esto es el aceite de coco, pero lo ideal es que este se consuma en frío.
Los cambios hormonales y el funcionamiento adecuado de nuestros órganos
En la década de los 40 todo es más lento, pero las hormonas empiezan a descompensarse. Esto tiene varias razones, y es diferente en los hombres y en las mujeres, ya que las mujeres tenemos un decline hormonal agudo. Cuando llega la menopausia la producción de hormonas se detiene como si se apagara el switch de la luz, los hombres por el contrario tienen una andropausia más prolongada. Pero, así como las hormonas sexuales cambian, las otras hormonas también, y quiero hacer énfasis en una hormona que es la melatonina, esta es la hormona encargada de regular el ciclo del sueño, no es que nos de sueño como comúnmente se conoce, es que sin esta es muy complejo empezar el ciclo de sueño y vigilia, en otros artículos ya hemos profundizado sobre la importancia de esta función, así que voy a ampliar un poco más sobre esta sustancia.
Para producir melatonina necesitamos oscuridad, pero a partir de los 35 años cada vez tenemos menos capacidad de producirla y si adicionamos pantallas el problema empeora y así el sueño se nos evapora en las manos, ¿Qué podemos hacer?
- Minimizar la exposición a la luz a partir de las 4 de la tarde: Si usamos pantallas, mermemos el brillo y ojalá que este configurado en modo nocturno, yo sé que es más difícil ver con esa configuración, pero sin lugar a dudas es más saludable. Esto también aplica para las tablets, los televisores, celulares y demás, pero si es muy difícil trabajar o disfrutar de la cotidianidad con esta función podemos implementar lentes bloqueadores de luz azul, los que son lentes naranja.
- Suplementar melatonina: A partir de las 6:00 pm comenzar a suplementar melatonina a una dosis de 2 mg como mínimo.
- Activar de la glándula pineal: Esta glándula queda en el cerebro y dentro de sus funciones esta ser la activadora de casi todas las hormonas, así que empezar a estimularla nos evita las descompensaciones hormonales; esto se logra oxigenado el cerebro que lo podemos lograr por medio de la terapia de oxivenación y la meditación al menos 10 minutos al día